La ciencia ficción de viajar por el mundo a través de tubos ultrarrápidos está adquiriendo cada vez más fuerza. Hyperloop busca crear un método de viaje que permita a las personas recorrer grandes distancias en lapsos de tiempo siempre menores. La historia es demasiado buena para ser verdad, pero es absolutamente correcta y veraz. El Hyperloop llegará pronto y cambiará para siempre la forma en que viajamos.
Si bien aún quedan varias cosas por hacer antes de que la fantástica idea del Hyperloop llegue al mundo real, es un concepto que vale la pena entusiasmar en el presente.
Técnicamente, el Hyperloop ya está aquí. La tecnología lleva ya un tiempo dando que hablar en el presente. El trabajo para llevar esa tecnología al mundo real ha estado dando resultados y avances considerables. El Hyperloop se ha probado recientemente. Aunque esta prueba solo implicó probar la cápsula, no hay duda de que es un paso en la dirección correcta. Los visionarios e ingenieros detrás del Hyperloop tienen una confianza total en la importancia del progreso que han logrado hasta ahora. Esa confianza se extiende al cronograma que nos llevará desde el presente hasta el momento en que la capacidad de viajar de Los Ángeles a San Francisco en solo treinta minutos sea algo que se convierta en realidad.
En la actualidad, el sueño es que el Hyperloop pueda alcanzar velocidades superiores a 1.120 kilómetros por hora. Ese sueño también incluye una tecnología de transporte que permita que bienes y personas de un lado del mundo lleguen a otro en un abrir y cerrar de ojos. Conocido como el quinto modo de transporte, el Hyperloop tiene el potencial de cambiar el mundo que nos rodea en diversos niveles. Si podemos transportar bienes de forma más rápida y eficiente, podemos cambiar la forma en que abordamos la ayuda humanitaria, el comercio internacional y mucho más. Podemos salvar más vidas que nunca.
Incluso en el nivel más fundamental, el Hyperloop cambiará la forma en que trabajamos. Ya no estaremos limitados por la mera geografía a la hora de buscar los empleos que queremos. Este concepto combinará la alta eficiencia energética con la propulsión eléctrica. El resultado final será algo que reducirá nuestra huella de carbono, disminuirá nuestra dependencia de los combustibles fósiles y nos permitirá interactuar entre nosotros de maneras nunca imaginadas.